Cuando realizamos medidas nunca obtenemos medidas exactas y esto es debido a los errores sistemáticos o de paraleraje. Con nuestros instrumentos de medidas podemos resaltar dos características:
La Precisión del instrumento que es la variación de magnitud más pequeña que el instrumento puede apreciar. Una regla dividida en milimetros es más precisa que una dividida en centímetros.
La Sensibilidad de un instrumento es la capacidad de este en apreciar pequeñas variaciones de magnitud.
Si relacionamos ambas definiciones podemos afirmar que cuanto menor sea el valor de su precisión mayor será su sensibilidad.
Además de la precisión y la sensibilidad tenemos que tener en cuenta en un instrumento la fidelidad. Se dice que un instrumento es fiel cuando después de medir numerosas veces la misma magnitud en las mismas condiciones los resultados son identicos.